¿CÓMO AYUDAR A UN FAMILIAR QUE PADECE UN DETERIORO COGNITIVO SEVERO?

El deterioro cognitivo severo implica un estado del paciente en el que sufre una gran pérdida de la memoria así como graves problemas de conducta, movilidad y problemas comunicativos.

Se puede dar el caso de que llegado este punto ya no reconozca a las personas que tiene a su alrededor, ni los lugares en los que se encuentra, etc. Llegado este punto de la enfermedad, el paciente no puede casi valerse por sí mismo ya que necesitará ayuda para solventar cualquiera de sus necesidades básicas como son asearse, alimentarse o trasladarse a cualquier estancia. Además, este estos pacientes son muy vulnerables a infecciones, especialmente a la neumonía.

Debido a todos estos factores, sus necesidades dependerán en la mayoría de los casos de un cuidador o una ayuda externa de personas expertas o instituciones.

Aquí van algunos consejos que ayudarán al paciente y a sus familiares y cuidadores:

–           Escuchar con atención lo que la persona tiene que decir, y darle mucho ánimo. Si la persona tiene dificultad para encontrar la palabra correcta o terminar una frase, pídale que la explique de una manera diferente; que le dé pistas para poder encontrarla

–           Prestar atención al lenguaje corporal: movimientos agitados o una expresión facial tensa puede causar malestar o angustia, y puede hacer más difícil la comunicación.

–           Utilizar el contacto físico para tranquilizar a la persona.

–           Vigilar los hábitos de higiene y los cambios posturales.

Para su bienestar y el de las familias  se recomienda asistir a centros de día donde se ofrece un servicio especializado destinado a ofrecer atención asistencial, peventiva, social sanitaria y rehabilitadora a personas mayores.

MENTE AYUDA A LOS FAMILIARES QUE TIENEN UN ENFERMO DE ALZHEIMER

El papel de los familiares es crucial en cualquier tratamiento y técnica con el paciente y por ello, con la colaboración de la Fundación Mente, se realizan sesiones de autoayuda donde se tratan las emociones, la relajación, la formación sobre la enfermedad y otras pautas y consejos para mejorar la calidad de vida del paciente y la de su cuidador principal.

La ventaja principal es que nuestros centros están dirigidos por especialistas en demencias, lo que nos permite además de cuidar de ellos, potenciar las terapias no farmacológicas. El personal que trabaja con nosotros recibe una formación continuada por parte de neurólogos y neuropsicólogos que además organizan los diferentes talleres a partir de la etapa en que se encuentra el paciente respecto a la enfermedad. Todo ello podemos llevarlo a cabo gracias a que hacemos hincapié al bienestar del paciente, el cual siempre estará receptivo a ejercitar su mente.

En nuestros centros de día terapéuticos se combinan las técnicas de estimulación cognitiva con psicomotricidad y terapia ocupacional. De forma individualizada se aconseja y se adapta a cada paciente, mediante una valoración inicial, en el grupo más adecuado para que trabajen de forma homogénea. Por ello disponemos de diferentes centros cada uno de ellos especializado en una fase de la enfermedad, con plazas de carácter privado y concertado (más de 50 plazas de dicho uso, que se pueden solicitar a través de la Ley de dependencia).

Además de nuestra trayectoria nos avala el Certificado ISO, que en 2011 fuimos el primer centro de día concertado de las Baleares que lo obtuvo, lo que garantiza nuestro sistema de gestión y el cumplimiento de los requisitos de calidad de nuestros servicios.